NUESTRA GRANJA DE COLOR NARANJA
En una pequeña granja, pero no en cualquier granja, vivían animales de todas las especies, tamaños y colores, desde el Puercoespín Crispín, hasta el Hipopótamo Hipo, como ves, no era una granja habitual. Un día cualquiera en el colegio durante el recreo, el Elefante Dante y el Pato Hato decidieron ver quien de los dos era más ingenioso:
- Ya te lo he dicho Hato yo soy el más ingenioso cuando hablamos de contar chistes- dijo el elefante con voz grave
- ¿Ah si? Y que me dices de los trabalenguas?- preguntó el pato con voz chillona. El pato tiene dos patas, dos patas tiene la pata. Un pico tiene el patito y se pica las dos patas. ¡ Qué metedura de pata!
- ¿Trabalenguas? oye y si te cuento mejor lo que me pasó el otro día cuando iba con mi familia?- propuso el elefante
- Esta bien, pero luego te pienso contar el trabalenguas más gracioso del mundo mundial - dijo el pato
- La historia pasó así:
"Los elefantes grandes
van de paseo
y los elefantes pequeños
hoy sin recreo.
Porque mamá elefantes
nos castigó
por no saber en clase
bien la lección.
Así que nosotros obedientes
tratamos de aprender
cuatro y una cinco,
cinco y una seis."
- ¡Que chulo! y encima rima a mi es que las poesías no se me dan muy bien... Me pasa como al Hipopótamo Hipo que esta con hipo, y nadie saber cómo quitarle el hipo al Hipopótamo Hipo... -dijo apenado el pato
- Pues muy fácil Hato, tu me enseñas trabalenguas y yo te enseño a rimar- concluyó el elefante.
Y así fue como estos dos animales además de aprender en el cole como sumar, restar, leer y comprender, aprendieron trabalenguas y rimas ayudándose el uno al otro. 
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